Gnome-Keyring y sus problemas fuera de Gnome

Estos días me encuentro usando Manjaro XFCE en mi portátil. Buscaba un escritorio GTK que consumiese menos que mi Antergos Cinnamon y de entre las opciones salió esta elegida, ya que es la edición principal de Manjaro (a las que se suman KDE y Gnome), puesto que es la que utiliza el líder del proyecto, Philip Müller.

De momento bien, adaptándome un poco al nuevo entorno, haciéndolo mío. Uno de los cambios que hago siempre es instalar Geary como gestor de correo. La razón es que me gusta mucho su interfaz, ya que es clara y funcional, y desde que empezó ha mejorado mucho en estabilidad y usabilidad. Es una aplicación viejoven, ya que aunque tiene años, lleva poco tiempo con un nuevo mantenedor que la ha conseguido meter bajo el paraguas de la Gnome Foundation y la ha reescrito toda en GTK+3.

Como buena app del entorno Gnome, usa el gestor de claves gnome-keyring. Esto hace que las contraseñas del correo se almacenen de forma segura bajo una clave única, y la idea para mejorar la usabilidad es que esa clave coincida con la del usuario. Evidentemente, si quieres mayor seguridad, puedes configurar el servicio para que use otra distinta, pero yo soy de los que considera que introducir todo el rato mi contraseña no es sinónimo de sistema seguro, más bien de lo contrario. Si ya han accedido a mi contraseña para habilitar la sesión, que lean mi correo es ya el menor de mis problemas.

Por eso me molestó el hecho de que pida en cada reinicio la contraseña para activar el anillo de claves. Además que como no estaba activado, necesitaba también todo el rato la contraseña de mi correo. Una lata, teniendo en cuenta que uso un generador/gestor de contraseñas (KeepassX, hablaremos otro día de él) y por tanto no son contraseñas sencillas, ni cortas, ni recordables.

Por suerte, la solución es muy simple. A saber, necesitamos retocar 3 archivos (en realidad, no es necesario introducirlo en los 3 archivos, ya que creo que el que gestiona esto es el gnome-keyring-pkcs11.desktop ,pero este tipo de fallo puede darlo en otros apartados en donde se usen los otros archivos, así que no hace daño configurar correctamente el anillo para nuestro escritorio):

Donde el asterisco se sustituye por los 3 archivos distintos. Y en el siguiente campo, debemos añadir XFCE a los escritorios:

Y listo. Lo más interesante es que esta solución vale para todos los escritorios que necesitéis, como por ejemplo Cinnamon o Mate. Solo hay que añadir su nombre en ese campo. Así que si alguna vez os habéis enfrentado a ese fallo, haced la prueba. En XFCE os aseguro que ha funcionado. A los que se pregunten que hace Unity ahí, tranquilos, yo también me lo pregunto 😉