El fin de una era en Canonical. En un sorpresivo post de Mark Shuttleworth, el fundador de Ubuntu anunciaba el final de los planes para Unity 8 y la convergencia, así como el final de Ubuntu Phone. No solo eso, si no que para la próxima LTS (la 18.04) la edición principal volverá a salir con Gnome como escritorio principal.
Este terremoto se debe a los malos resultados de la apuesta personal de Shuttleworth, tal y como el mismo admite. Por un lado, reconoce que Mir y Unity 8 fueron vistas por la comunidad como un intento de fragmentarla, en vez de como algo útil. Y por el otro, que los fabricantes prefirieron "malo conocido" (clara y textual referencia a Android) o incluso sus propios desarrollos de sistemas operativos antes que Ubuntu Phone. Por tanto, es un área de desarrollo de Canonical que han preferido cerrar para centrarse en sus líneas principales, que son el sistema de escritorio, el sistema para servidores en la nube y el internet de las cosas.
En ese mismo post, nos recuerda la fortaleza de Ubuntu en esas áreas, donde es una de las distros más utilizadas, que cuenta con grandes contratos de proveedores Cloud (como Amazon) y que muchísimos proyectos de IoT confían en Ubuntu en su base, como robots o vehículos autoconducidos. También reafirma su apuesta sobre la paquetería Snappy y el núcleo de Ubuntu, así como en los sabores de la distro.
Como resumen a todo esto (aún estamos a digerirlo todos un poco). No veremos más terminales (móviles o tabletas) con Ubuntu (al menos de forma oficial). No veremos Mir, ni Unity 8 y su base en Qt. Aún no han dicho cuantas versiones más se aguardan con Unity 7 como principal, aunque la próxima 17.04 vendrá así. Las dudas quedan para la 17.10, la previa antes de la próxima LTS la cual ya han confirmado con Gnome (e incluso puede que Wayland). Y a los que no les guste Gnome Shell, siempre podrán escoger otro de los sabores oficiales, que también seguirán en desarrollo.
El destino de Unity, tanto 7 como 8, quedará en manos de la comunidad, si es que alguien quiere mantenerlos. Vista su aceptación fuera de Ubuntu, yo no apostaría, pero esto es ya opinión personal. Y entrando en la opinión, como exusuario de Ubuntu, a mi me parece un movimiento acertado. Cortan los desarrollos que robaban tiempo a la distro sin proporcionar nada tangible (los teléfonos aún estaban verdes) y se centran en lo que mejor saben hacer, una distro linux para seres humanos. Esperemos que gracias a este movimiento le den un buen empujón a la distro y puedan servir de punta de lanza para que más y más gente se acerque a este mundo.
No soy fan de Canonical, pero Ubuntu es demasiado importante en Linux como para que desaparezca, y nos viene bien a todos que crezca. Que este paso sea en la dirección acertada.